Estamos frente a una nueva revolución industrial la cual creemos impulsará construcción de un nuevo modelo energético que cambiará la manera en que generamos, consumimos, almacenamos y compartimos la electricidad.
Prevemos un nuevo sector de la energía caracterizado por el uso de energía 100% limpia, la electrificación, la digitalización, la descentralización, la desintermediación, el comercio de energía entre iguales y los prosumidores, un nuevo agente que cambiará el sector y la economía mundial.
Sin embargo y pese al futuro auspicioso que tenemos por delante, el sector de la energía necesita superar grandes barreras y desafíos. El sector en todo el mundo ha comenzado a cambiar y DEXENTRALIZE quiere liderar este cambio haciendo participes a todos los miembros de la comunidad.
Grandes centrales generadoras
Transmisión y distribución
Retail
Consumidores y prosumidores
Al ritmo actual de crecimiento de la concentración de CO2 en la atmósfera pasaremos en menos de 50 años de los 500 PPM, lo que empujará irremediablemente la temperatura global por sobre los 2ºC, generando graves consecuencias para el medio ambiente, la humanidad y el planeta.
Modelo energético centralizado, lo que genera graves problemas de seguridad, fiabilidad, eficiencia y resiliencia que derivan en constantes problemas de suministro, cortes e inseguridades ciudadana.
Servicios de suministros caros, intermediados, poco transparentes y eficientes, con limitadas posibilidades de escoger un servicio de suministro eléctrico asequible, con precios equitativos y 100% limpio.
La centralización, la constante variación del precio de los combustibles fósiles, la transmisión, distribución, así como una cadena importante de intermediarios, hace que los precios de la energía sean poco transparentes, asequibles, equitativos y en constante cambio.
El actual modelo energético no permite el aprovechamiento de todo el potencial de las tecnologías limpias, uso eficiente de los recursos distribuidos y la expansión de los prosumidores.
En la actualidad, alrededor de mil millones de personas en todo el mundo siguen viviendo sin electricidad, mientras que cientos de millones mas viven con un acceso limitado, insuficiente o poco confiable a ella.